Avalancha...

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La verdad no estoy inspirada pero de un momento a otro, sentí la necesidad de plasmar ideas, sensaciones y pensamientos que cruzan por mi cuerpo en estos instantes. Quizás sea tan sólo ese sentido de desolación que he llevado conmigo estos días. Esa sensación de rabia al ver la felicidad ajena. Esa soledad que yo sola me he ocasionado. Palabras fuertes, discusiones, lágrimas, arrepentimiento. Y lo que me pregunto es ¿en realidad lo valdrá?  ¿O realmente no me preocupo por lo que de verdad importa? ¿Pero qué es eso que realmente importa? ¿Qué es ese algo que he estado buscando incansablemente y que quizás hasta el momento, siga siendo infravalorado? Pertenecer a algo, ser tan sólo un estereotipo más, siguiendo a un todo. Creo que por el momento, no es lo que busco. Lo que quiero conseguir es la felicidad. No sé qué tipo de felicidad. Ni siquiera sabía que la felicidad podía estar dividida en varias ramas. Pero qué más da si es algo que te puede hacer sonreir por un momento y sumergirte en estúpidas ilusiones mientras tu mente es anestesiada por todos esos recuerdos aun inexistentes, hasta que en esa persecución de la felicidad, realmente crees que están ahí, en alguna parte de tu pasado. ¿Qué pasado? ¿Tienes algún futuro? Y es que yo sigo aquí sentada, reflexionando, sigo plasmando ideas al azar aquí al no encontrar otro medio mejor. Este no es el tipo de cosas que te gustan compartir, a menos que sea anónimamente. Tan anónimo como tu, como yo... En tanto sigo mezclando estas ideas, ansiosas por salir de aquel sombrío lugar de mi mente. Temerosas al principio y finalmente se van acoplando. Observo mis recuerdos pasar por mis ojos. ¿Serán recuerdos? ¿O tan sólo un producto de mi imaginación. Y mientras me pregunto eso, las horas siguen pasando. El reloj sigue su curso. Palabras aun sin ser dichas. Pensamientos aun no pensados, aunque realmente no hace sentido, como todo en este mundo. ¿Obervas las estrellas? Se mantienen unidas en el firmamento esperando a que una luz más fuerte las haga desaparecer, pero sabemos que siguen ahi. Corres los mismos caminos de siempre y anhelas con fervor uno nuevo. ¿Realmente lo valorarías? Sé cuidadoso con lo que deseas, con lo que dices, con lo que escuchas. Hay un límite para todo. Ese límite marcado por alguien o algo que va más allá del poder que creen tener algunas personas; más allá de las estrellas. ¿Sientes esa frustración? ¿Esa soledad? ¿Esa sensación de que nada puede mantenerse perfecto (en su totalidad) ni por un segundo? Odio los términos medios. No quiero un "no sé" o un "quizá". Quiero algo más que eso. Algo más concreto... Un "si" o un "no" me parece conveniente. Mi respiración se va acelerando y un escalofrío recorre cada milímetro de mi cuerpo. Mis tormentos han regresado. Pensamientos suprimidos. Deseos que no han de ser deseados. Palabras que no debieron haber salido de mi. Y es que todo es tan difícil de controlar. Aunque en realidad no hay nada que podamos controlar...   

Blue Staple

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